El 19 de octubre de 2016, Felipe Garrido salió a las calles de Chile a protestar en la marcha "Ni una menos". Este joven se hizo viral porque no traía camisa y encima tenía un cartel que rezaba: "Estoy semidesnudo, rodeado por el sexo opuesto... y me siento protegido, no intimidado, quiero lo mismo para ellas.". Inmediatamente se hizo viral esta foto, y las redes enloquecieron, porque un hombre era feminista. Es gracioso como si una mujer sale a la calle sin playera para protestar por sus derechos es una "feminazi", y su comportamiento es grotesco, mientras que si lo hace un hombre, es un héroe, y debería ser escuchado, porque es tan amable por hacernos el favor de apoyar nuestra causa.
Y parece que le hacen más caso a un hombre cuando abre la boca para hablar sobre temas como el aborto, o nuestra sexualidad, pero una mujer se ve mejor callada.
La ironía detrás de esto es que Garrido tiene denuncias por violencia doméstica, por parte de su ex pareja Fran Palma. Ella afirma que junto con su hija sufrió los maltratos de este hombre, acompañado de dolorosas historias, historias contadas por las numerosas cicatrices que ha dejado en su piel los golpes y hasta los platos rotos.
Garrido nunca hizo declaraciones al respecto.
Tal pareceque ni siquiera en los temas donde la voz es nuestra somos tomadas en cuenta.
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